lunes, 24 de mayo de 2010

Poema

A UN COTO DE CAZA EXTREMEÑO
Prohibido respirar...porque es privado
esa encina, ese campo y ese viento
y hasta el aire que aspiras en tu aliento
con el hierro de un amo está marcado.

Entre rejas de alambre, han encerrado
el latido caliente y turbulento
de ese río de vida en movimiento
bajo forma de liebre o de venado.

Para coto privado es reservada
esta tierra de verde vestimenta
y esa vida que nace condenada

a vivir al temor de una tormenta
de pólvora y de plomo..., granizada
que mata impunemente lo que alienta.

Wenceslao Mohedas Ramos (Gracias por tus poemas...)

Primer Premio del Certamen Regional de Extremadura, "Martes Mayor" de Plasencia (Cáceres), de 1983.

1 comentario:

Wenceslao Mohedas Ramos dijo...

Hola, mi estimada amiga Mari Carmen; quiero continuar introduciéndote poemas en tu blog para contribuir con mi humilde granito de arena lírico al enriquecimiento de él. Quiero hoy introducirte en este apartado de "Poema" al autor del poema, es decir, el "POETA". Aquí te envío un poema en el que defino de forma poética qué es para mí ser poeta. Espero y deseo que te guste. Un abrazo fraterno de un "extremelán", extremeño en Cataluña
Wenceslao Mohedas Ramos
Jaraicejo (Cáceres) / Barcelona

EL POETA (1)


El poeta es un hombre natural, solitario... ,
sin rincones ahumados ni morales dobleces
que aprendió soledades para ser solidario
y beber de la vida sus más ácidas heces.

El poeta es un pardo, montaraz campesino
y, en sus surcos de versos, insemina semillas:
sentimientos, ideas... con salario mezquino
por su áurea cosecha sobre blancas cuartillas.

El poeta es notario de esta efímera vida
y, en sus versos, la canta porque quede constancia
de su gente y su tiempo; sin su canto se olvida
y se viste de polvo su frangible fragancia.

El poeta es del pueblo la viviente conciencia
que vocea en la noche con su voz dolorida
y le duele esa vida de anodina indolencia
en que vive abismada tanta mente dormida.

El poeta es un mártir, tal un chivo expiatorio,
a quien almas perversas le disparan desprecio;
de por vida condenan a un social purgatorio;
despreciar al que sabe es el vicio del necio.

El poeta es Quijote, defensor de ideales:
el honor, la justicia... con su pluma por lanza;
los ajenos problemas son para él personales
y los sufre muy solo, sin un fiel Sanchopanza.

El poeta es un Sísifo que , a su espalda, se carga
el pedrusco más tosco -¡su dolor y el ajeno!-
y lo sube a la cumbre por la senda más larga,
la vereda del verso de escabroso terreno.

El poeta es el águila, que se eleva hacia arriba
con la ayuda de alas: fantasía , cultura...
para dar a los hombres la mejor perspectiva
de este valle de llanto con su imagen más pura.

El poeta es la abeja de una inmensa colmena
y, con polen de penas, elabora su miel;
de ambarinas dulzuras a su prójimo llena,
mas su alma almacena amarguras de hiel.

El poeta es la fuente donde sacia el sediento
esa sed de infinito que a las almas abrasa
y anestesia su angustia, su vital desaliento
con ideas, emociones, sentimientos..., sin tasa.

El poeta es espejo que la vida refleja
con dos caras opuestas en su faz cristalina,
donde el llanto y la risa siempre forman pareja
tal la luz con la sombra; con la rosa, la espina...

El poeta es la antena de emisiones humanas
porque siente y "con-siente" los sutiles latidos
de las zonas del alma más oscuras y arcanas
y descifra en palabras sus ignotos sonidos.

Pararrayos que atrae al flamígero rayo
de tormentas sociales que desata la ira
del tirano de turno que lo torna en cobayo
y lo pone a su alcance, bajo el punto de mira.

El poeta es un faro que ilumina el camino
y se quema su vida para darnos su luz
y alumbrar en los hombres un destello divino
porque sufre tal Cristo de sus versos la cruz.

El poeta es diamante, una gota de estrella;
con frecuencia, la infamia lo mancilla de lodo,
pero es tal su pureza y el fulgor que destella
que se limpia a sí mismo en muy breve periodo.

El poeta es un hombre desde pies a cabeza
que se entrega a otros seres con sus brazos abiertos
y es tan grande su afecto, su bondad, su nobleza...
que hablará con los vivos cuando esté entre los muertos...

Wenceslao Mohedas Ramos

(1) Primer premio en el certamen de poesía "La Morera Sombría”, patrocinado por el Excelentísimo Ayuntamiento de Badalona (Barcelona).